En la asignatura de Griego nos mandaron hacer una reflexión a partir de un trabajo (sobre el que ya he hecho tres entradas anteriormente) de la filosofía en la Antigüedad. En mi trabajo he intentado recorrer la gestación y nacimiento de la filosofía. He intentado también plasmar mi opinión sobre las distintas cuestiones que se plantearon en la antigua Grecia.
Es increíble ver como la filosofía griega evolucionó y como ha ido evolucionando hasta tener tanta relevancia en la manera de pensar occidental y también mundial.
En primer lugar, sorprende como los helenos, al parecer un pueblo como cualquier otro, se plantean las cosas de otra forma y hacen que nazca la filosofía. Podemos ver que este nacimiento no es repentino, sino que pasa por distintas etapas. Los griegos, como todos los pueblos de la Antigüedad se preocupaban por cuestiones trascendentales, pero esto no es lo importante, sino que para dar respuesta a esas cuestiones escogieron o crearon un sistema distinto al de los demás: la filosofía. A pesar de ello, podemos ver que los griegos crearon al principio una serie de mitos para dar explicación a los distintos sucesos que ocurrían en el mundo, y el paso del mito al logos no sucedió de manera rápida e inesperada, sino que es un proceso.
En la primera etapa, podemos ver como los helenos se cuestionan lo que pasa alrededor y crean un sistema de mitos para responder a sus inquietudes. Ciertamente estos mitos no son creados mediante la razón o argumentativamente, pero si mediante la observación. Los mitos son perfectamente posibles y encajan con la realidad de aquella época, lo cual supone una base que bajo mi punto de vista fue necesaria para el nacimiento de la filosofía. Es decir, creo que la observación llevada a cabo para crear los mitos es fundamental para el paso del pensamiento mítico al racional. Es cierto que al principio las respuestas son arbitrarias, pero son elaboradas mediante la observación. Es decir, igual que la filosofía, nace de la voluntad de querer dar respuesta a los interrogantes sobre el mundo. Por lo tanto, aunque lo mitos no sean elaborados mediante un pensamiento racional y argumentativo, no son tampoco irracionales, ya que encajan con la realidad de la época y son posibles. También podemos observar que los mitos eran cuestionados, por ejemplo por los órficos, algo que también es necesario para el nacimiento de la filosofía: el pensamiento crítico.
Otro punto que considero clave para la creación de la filosofía es que los primeros “filósofos” se plantearan que quizás los mitos no eran ciertos y observaran el mundo como si fuese la primera vez, dejando a un lado cualquier especulación anterior, como dice Aristóteles. Quizás los primeros en hacer esto seguían creyendo en la veracidad de los mitos, pero actuaron teniendo en cuenta la posibilidad de que no fueran ciertos.
Es importante también que los griegos, con una situación económica favorable y con tiempo para ocuparse de asuntos que no fueran del todo prácticos, observaran la diversidad y la complejidad de la naturaleza e intentaran dar una explicación a ello. Podemos ver que los primeros filósofos estaban ligados a la ciencia. Es decir, buscaban dar respuesta a lo que ocurría en la naturaleza mediante la ciencia. Pero hubo una cuestión que no podían responder mediante la experimentación: el origen de todo, el arjé. A partir de aquí los distintos presocráticos intentan dar respuesta a ello mediante la combinación de hipótesis, ciencia y razón. Podemos ver que las distintas teorías pueden ser verdaderas o falsas, pero que ya se llevan a cabo mediante el mero uso de la razón. Estos filósofos ya empiezan a tratar temas muy relevantes posteriormente, como puede ser una concepción objetiva de la verdad como algo independiente del sujeto, como defendía Jenófanes.
Algo también relevante es que unos siguieron la labor de los otros, es decir, hubo una continuidad. Podemos ver como Empédocles y Anaxágoras tienen en cuenta a los anteriores pensadores y a partir de esas teorías, continúan haciendo otras. Seguramente en otras culturas también se plantearan las mismas preguntas, pero no se les dio importancia.
Algo común a todos estos pensadores es que tratan sobre todo el problema de la naturaleza, “physis”. Lo hacen mediante la ciencia y la filosofía. La cuestión más grande con la que se encuentran es la relativa al principio de todas las cosas, el “arjé”.
La conclusión que yo saco es que todo proviene de algo incontingente, que no está sujeto al espacio ni al tiempo. Todas las cosas que vemos en el mundo están hechas unas de otras y por lo tanto, son contingentes y algo contingente no puede ser increado. Debió de haber algo que es el principio de todo ya que de la nada no puede salir algo. De este modo, el principio de todo sólo puede ser algo incontingente, que no esté sujeto al espacio ni al tiempo, que no dependa de nada para existir y que por lo tanto exista por sí mismo.
Los sofistas, bajo mi punto de vista, suponen una transición entre los filósofos presocráticos (físicos) y los filósofos a partir del giro antropológico (metafísicos). La principal idea que defendían los sofistas es que la verdad no existe, sino que sólo existen opiniones. Creo que pensar esto es algo normal después de un tiempo en el que, tras muchos planteamientos, no se había obtenido más que teorías individuales y, por lo tanto, muy diversas. Es decir, creo que los sofistas, tras ver que la filosofía no había podido dar respuestas completamente irrefutables, deducen que la verdad no existe y que si existe no puede ser conocida por los hombres. Los sofistas pensaron que lo importante era desarrollar la capacidad para defender la opinión propia y así poder obtener distintos fines. Así la opinión del que mejor domine la retórica y la dialéctica, aunque falsa como el resto, triunfará. De este modo la causa de los sofistas fue degenerando hasta convertirse en personas manipuladoras y egoístas.
Sócrates rechazó el relativismo de los sofistas y defendió que debía
existir una definición universal. Con Sócrates podemos observar también el giro antropológico de la filosofía. Aunque también es cierto que ya se habían tratado temas que no tenían que ver con la naturaleza estrictamente con anterioridad, como la política. Sócrates ve en la filosofía un instrumento para alcanzar el conocimiento del bien moral, es decir, se centra plenamente en el hombre como individuo. De esta forma, se crearía lo que hoy conocemos como ética.
La principal diferencia que se puede observar es que los sofistas defendían el relativismo mientras que Sócrates lo rechazaba. Yo personalmente pienso que debe existir una verdad universal. Los propios sofistas defendía una: “la verdad no existe”, contradiciéndose prácticamente. La filosofía no tendría sentido si no se creyera en la existencia de esa verdad universal, ya que es lo que busca, independientemente del problema a tratar. Si no existiera una verdad única, nada sería posible. Debe existir esa verdad que rija todo, pero que al parecer es muy difícil de alcanzar mediante la razón únicamente.
A partir de Sócrates la filosofía ya se constituye como tal. Aunque es cierto que sigue evolucionando y disgregándose en diversas ramas, el método de filosofar ya está constituido. Este método consiste en la búsqueda de definiciones válidas y verdaderas para todo mediante la razón y la argumentación.
Podemos ver como los posteriores filósofos antiguos, sobre todo Platón y Aristóteles, han tenido gran influencia a posteriori y que todavía hoy siguen siendo dos de los filósofos más importantes de la historia de la filosofía.
En la formación de la filosofía podemos ver como todos los pensadores toman cosas anteriores a ellos y como influyen en los autores posteriores a ellos. Al fin y al cabo, el nacimiento de la filosofía se reduce a querer dar respuesta a los interrogantes del mundo; primero con los mitos, luego con el paso del mito al logos, el estudio de la naturaleza y finalmente con el centrarse en el hombre.
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