En primer lugar, debo reconocer que esta entrada es un "plagio" de la entrada de otro blog llamado "mi ágora particular".
El blog está comenzando y es ahora donde se deben de marcar las bases. Una de éstas que quiero traer al blog es el diálogo, y un diálogo que lleve a algún sitio. Este escrito de Norberto Bobbio describe perfectamente como debe ser el diálogo, que finalidades debe tener y que medios.
Además es una estupenda reflexión que podemos aplicar al día a día.
"Normalmente no pretendo tener la última palabra. No me gusta ni me proporciona la menor satisfacción. Detesto las discusiones inacabables, debidas únicamente a razones de prestigio y no a la necesidad dialógica. Tras el intercambio de opiniones trato de arreglármelas para evitar la ruptura y recurro a la vía de la conciliación. Al final prefiero tender la mano a volverme de espaldas. La finalidad del diálogo no es mostrar que eres el mejor, sino llegar a un acuerdo o por lo menos aclararse recíprocamente las ideas."
(Norberto Bobbio)
Me alegro de serte de utilidad, Mateo.
ResponderEliminarPor cierto, excelente selección musical en tu playlist
gracias por ambas cosas
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